ATE LANZO UN PARO PARA EL 23 DE ABRIL EN RECHAZO AL AUMENTO SALARIAL “POR DEBAJO DE LA INFLACION Y LA DEVALUACION”

Las protestas del miércoles 23 de abril comenzarán a las 11 de la mañana con diversas modalidades que incluirán asambleas, paros, radios abiertas, cese de tareas y retiros de los lugares de trabajo. ATE no descartó que en algunos casos puedan producirse bloqueos, dejando a cada organismo la definición específica de sus acciones de protesta.

La medida de fuerza nace como una respuesta contundente al acuerdo paritario firmado recientemente, que ATE considera «por debajo de la inflación y la devaluación» impulsada por la administración de Milei.

El titular del gremio estatal, Rodolfo Aguiar, afirmó que, «no le podemos dar tregua a un Gobierno que está perdiendo el consenso social. El daño que nos causaron a los estatales con la complicidad de otro sindicato en la última paritaria es irreparable», subrayó.

El dirigente enfatizó en la necesidad de «multiplicar las protestas en todos los sectores para rechazar la posibilidad que se siga recortando en el Estado» y convocó a los trabajadores a afiliarse masivamente a ATE para «ser mayoría en el Estado Nacional para impedir el fraude en las paritarias».

La decisión se tomó durante un encuentro del Secretariado Ampliado realizado en el Hotel Héctor Quagliaro del sindicato en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En este contexto, Aguiar destacó que «el plan de lucha que hemos mantenido los estatales ha evitado que haya una mayor cantidad de despedidos y que la transformación del Estado encarada por el Gobierno no sea tan profunda», expresó.

El titular de ATE también advirtió sobre las intenciones del Ejecutivo y resaltó que, «tenemos que impedir que el presidente Milei cumpla con las amenazas que hizo por Cadena Nacional de seguir ajustando sobre el sector público y acelerar el proceso de privatizaciones», apuntó.

La protesta del 23 de abril también tendrá como eje central el rechazo al nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). «Un entendimiento que se traduce en más ajuste para los jubilados y menos derechos para todos los trabajadores. Tenemos que rechazar la injerencia del Fondo en la economía y en la vida cotidiana de las argentinas y los argentinos», sentenció Aguiar, al tiempo que manifestó la oposición del gremio a las reformas previsional, tributaria, laboral y de coparticipación que se intentan implementar.

Por su parte, la Secretaria Adjunta de ATE, Mercedes Cabezas, señaló que «dirigentes nacionales de nuestro sindicato nos reunimos para poner en agenda nuevas medidas de fuerza para las próximas semanas. Estamos de acuerdo en que la imagen del Gobierno en todo el país se está derrumbando y en parte, es gracias a la lucha que venimos dando desde antes que asumiera», reflexionó.

Cabezas fue crítica con el acuerdo con el FMI, calificándolo como «no sólo una nueva toma de deuda, sino que esconde detrás, un nuevo ajuste que otra vez pagaremos jubilados, estatales, docentes: es decir la clase trabajadora. Es una nueva condena a nuestros hijos y nietos, a que no puedan tener proyectos a largo plazo en su propio país». La dirigenta reafirmó el compromiso de ATE de «seguir dando la pelea en todos los frentes» y poner en agenda que «parar es un derecho y que organizarse nos da garantías de que nadie se salva solo».

ATE lanzó una campaña masiva de afiliaciones con el objetivo de fortalecer su representatividad en el Estado y lograr revertir la desfavorable situación salarial que atraviesa el sector público.

Cabe recordar que la última paritaria para los trabajadores de la Administración Pública Nacional (APN) cerró con un aumento del 1,3% para los meses de marzo, abril y mayo, un porcentaje que ATE calificó de «irrisorio» al representar apenas un tercio del 3,7% de inflación que el INDEC informó para el mes de marzo. Este acuerdo fue aceptado por la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), generando el fuerte rechazo de ATE.

Finalmente, el sindicato también expresó su preocupación por la reciente devaluación del 13% registrada en la última semana, producto de las últimas medidas económicas anunciadas por el Ejecutivo nacional, lo que agrava aún más la pérdida de poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores estatales.