(9 de octubre) La inflación en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en septiembre fue de 4%, con una leve desaceleración respecto al 4,2% que se produjo en agosto, según informó oficialmente la Dirección de Estadística porteña.
De esta forma, la variación interanual se ubicó en 218,8%, mientras que el acumulado de 2024 trepó a 115,1%.
De allí que el conjunto de bienes subió 3,1% y el de servicios 4,6%. Por otro lado, los precios de los productos estacionales avanzó 2,9% y los regulados subieron 4,8%.
En tanto, el rubro alimentos exhibió un alza de 2,2%, casi la mitad que el índice general. Al interior de la división, los principales impulsos provinieron de Carnes y derivados (4,1%), pan y cereales (2,5%) y leche, productos lácteos y huevos (2,3%).
A su vez, todo con referido al cuidado y aseo personal tuvo un incremento de precios de 4,7%. En lo que respecta al mantenimiento del hogar, la suba fue de 4,3%, producto del incremento en alquileres, y en menor medida por las tarifas de los servicios públicos.
La inflación en la Ciudad de Buenos Aires marcó el 4% y quedó lejos de la aspiración del Gobierno para congelar los aumentos paritarios
Por las actualizaciones en los pasajes y los aumentos en los combustibles, el rubro transporte registró un alza de 5,1%.
A su vez, el rubro salud tuvo un incremento promedio de los precios de 5%, por el nuevo aumento en las cuotas de la medicina prepaga. En tanto, a partir del cambio de temporada la indumentaria tuvo un alza de 5,6%, pese a la recesión que frenó ventas.
Por su parte, la educación exhibo un incremento de 3,6% por el ajuste de las cuotas de los colegios privados. Por otra parte, hoteles y restaurants subió 3,7%, por debajo del promedio general, mientras que recreación y cultura tuvo un alza de 5,2%. A su vez, seguros y servicios financieros aumento 6,9%.
La inflación en la ciudad resulta un proxy de la inflación nacional con la salvedad de que tiene un mayor impacto todo lo relacionado con el mantenimiento de la vivienda y los servicios públicos.
El Gobierno aspira a que la inflación a nivel nacional quede por debajo de 3,5%. El dato oficial del INDEC se conocerá el próximo jueves.
El número porteño representa un golpe a los planes del oficialismo de ir en un esquema descendente en materia de negociaciones paritarias hasta llegar a 0. De hecho eso es lo que el Gobierno propone para los estatales, a quienes el último mes les «aumentaron» apenas un 1% y ya se habla de un congelamiento para el último tramo del año.
El esquema del ámbito público era el modelo con el cual se quería marcar un camino en el sector privado. Los números porteños empiezan a poner en duda la capacidad de lograrlo.